El pasado sábado 28 de abril, celebramos juntos la gran fiesta del Colegio Mayor; donde se graduaron 8 de nuestros colegiales, que han estado con nosotros cuatro años, hasta el final de sus carreras universitarias. Tras pasar un agradable día en el campo, donde se terminó de resolver el torneo por pasillos que finalmente dejó campeón al pasillo del tercer piso; volvimos al Colegio Mayor para celebrar la Eucaristía y tras ello, el acto académico de graduación. En él, pudimos escuchar palabras de despedida, y contemplar alguna que otra lágrima.
Tras el acto académico, tuvo lugar la cena de gala en el comedor y tras ello, el baile en la carpa habilitada para ello en los exteriores del Colegio. Una fiesta que pone punto y final a una semana cargada de actividades, y es gran colofón de un buen curso 2017-2018. En unos días, subiremos un vídeo recopilatorio de fotos de esta semana de fiestas.
Enhorabuena a Iván, Juan Antonio, Manuel, Pablo, Javier, Alejandro, Abel y Marcos, por ser ya graduados en el Colegio Mayor Tomás Luis de Victoria. ¡Muy bien Tomás!
Como broche final al curso 2017/2018, la comisión de Convivencia organizó anoche en el comedor la tradicional cena de pinchos, donde los colegiales pudieron degustar los exquisitos pinchos preparados por el personal de cocina, en un ambiente festivo y relajado, en medio del intenso estudio que marca ahora el ritmo de la Casa.
Es ya momento de recoger los frutos de un año de esfuerzos, estudios y sacrificios, y dar la bienvenida en unas semanas al merecido descanso estival.
El martes, tenía lugar la última oración del grupo de formación y oración del Colegio Mayor. Un buen momento para dar gracias a Dios por el curso, y orientar los esfuerzos ante este último mes de exámenes.
El pasado sábado 28 de abril, celebramos juntos la gran fiesta del Colegio Mayor; donde se graduaron 8 de nuestros colegiales, que han estado con nosotros cuatro años, hasta el final de sus carreras universitarias. Tras pasar un agradable día en el campo, donde se terminó de resolver el torneo por pasillos que finalmente dejó campeón al pasillo del tercer piso; volvimos al Colegio Mayor para celebrar la Eucaristía y tras ello, el acto académico de graduación. En él, pudimos escuchar palabras de despedida, y contemplar alguna que otra lágrima.
