lunes, 30 de noviembre de 2015

COMIENZA EL ADVIENTO

Ayer iniciábamos el tiempo de Adviento, cuatro semanas en las que la Iglesia nos invita a prepararnos debidamente para la llegada de la Navidad. Desde el Colegio Mayor Tomás Luis de Victoria también queremos vivir intensamente este tiempo de espera y esperanza, en el que estamos llamados a reavivar y confirmar nuestra fe en Jesucristo. Como comunidad universitaria cristiana iremos alumbrando cada domingo una nueva vela en la corona de Adviento de nuestra capilla, simbolizando con ello el camino recorrido, los pasos de nuestra vida, a la espera de que Jesús nos ilumine plenamente con su luz. En estos tiempos de confusión, de tensión y miedo, el mensaje del Adviento nos invita a la confianza plena en el Dios encarnado, que toma nuestra mano y nuestras vidas mientras nos susurra suavemente: "¡Ánimo! No tengáis miedo". Que cada vela que encendamos nos acerque un poco más a Dios, que verdaderamente reavive la fe bautismal en la que hemos sido educados, que vaya modelando nuestra vida según el proyecto que Dios ha soñado para cada uno de nosotros y que nos impulse a mirar más allá de las fronteras de nuestra comodidad, haciéndonos sensibles a las necesidades de tantas personas que carecen de lo más básico para vivir.

Sólo si sabemos vivir intensamente el Adviento llegará de veras la Navidad, más allá de las luces, las compras y las felicitaciones de rigor. Como nos van recordando estos días las lecturas en la liturgia, debemos preparar el corazón y la casa, porque pronto llegará el Dueño y Señor de nuestras vidas. 

martes, 17 de noviembre de 2015

EXCURSIÓN A MADRID

El domingo, 15 de noviembre de 2015, un grupo de colegiales acompañados por Enrique Vicente y el P. Antonio nos encaminamos bien temprano hacia la capital de España. Superadas algunas dificultades con el aparcamiento debido a múltiples cortes de tráfico, conseguimos llegar puntuales a las diez de la mañana a nuestra cita con el Museo del Prado, donde pudimos contemplar algunas de las mejores obras pictóricas de la historia del arte. Renovado y henchido el espíritu por la sublime experiencia estética, nos dirigimos apresuradamente hacia el Palacio de los Deportes de Madrid. Allí disfrutamos del partido que disputaban el Real Madrid y el Manresa, que se saldó con una contundente victoria de los locales.



Terminado el espectáculo deportivo y ya con más pausa acudimos al encuentro de nuestro guía, con quien realizamos una hermosa visita por el Madrid de los Austrias, en la que además de historia aprendimos anécdotas y leyendas de la noble villa madrileña. Al terminar aprovechamos para celebrar juntos la Eucaristía en la iglesia de San Ginés.

Sin duda y como siempre, lo mejor de la jornada ha sido la convivencia y el buen ambiente que ha reinado entre todos, además de las muchas cosas que también hemos aprendido. ¡Hasta otra Madrid!